Madrid, 19 de agosto de 2011. El Papa Benedicto XVI acudió hoy a la residencia de la familia real, el Palacio de la Zarzuela, en donde tuvo una reunión con el rey Juan Carlos de Borbón. A su llegada fue recibido por el monarca y su esposa, doña Sofía. Más tarde tuvo un encuentro privado con don Juan Carlos. Al final del acto, el pontífice visitó al resto de la familia real, incluyendo el Príncipe de Asturias (foto).
Después de esta visita Benedicto XVI se dirigió al monumento de El Escorial, donde se encontró con jóvenes religiosas. En su alocución, habló del eclipse de Dios: “El encuentro personal con Cristo que nutre vuestra consagración debe testimoniarse con toda su fuerza transformadora en vuestras vidas; y cobra una especial relevancia hoy, cuando se constata una especie de ‘eclipse de Dios’, una cierta amnesia, más aún, un verdadero rechazo del cristianismo y una negación del tesoro de la fe recibida, con el riesgo de perder aquello que más profundamente nos caracteriza” (Mensaje para la XXVI Jornada Mundial de la Juventud 2011, 1).
Al final de su reunión con las religiosas, el pontífice se trasladó a la Basílica de El Escorial, en el mismo monumento histórico para dirigir unas palabras a los docentes universitarios, y los exhortó a hacer de la universidad una casa en búsqueda de la verdad: “Sabemos que cuando la sola utilidad y el pragmatismo inmediato se erigen como criterio principal, las pérdidas pueden ser dramáticas: desde los abusos de una ciencia sin límites, más allá de ella misma, hasta el totalitarismo político que se aviva fácilmente cuando se elimina toda referencia superior al mero cálculo de poder. En cambio, la genuina idea de Universidad es precisamente lo que nos preserva de esa visión reduccionista y sesgada de lo humano”.
Por la tarde el Papa almorzó con doce jóvenes de los cinco continentes. El menú será preparado por el restaurante “La taberna del Alabardero”.